Sálvame ha preparado un homenaje a Jesús Gil y a la Marbella más glamourosa para sus tardes de agosto, convirtiendo a los colaboradores en algunos de los personajes más emblemáticos de la época. La encargada de la transformación y el especial 'Marbella, y tal y tal' ha sido la que fuera concursante de Gran Hermano 1, Ania Iglesias.

La veterana colaboradora ha regresado a la televisión para realizar los estilismos, convirtiendo a Chelo García Cortés en el propio Jesús Gil o a Lydia Lozano en la mismísima Gunilla von Bismarck, uno de los rostros más representativos de la época dorada de Marbella.

Y precisamente ha sido con Lydia con quien Ania ha chocado, terminando ambas enfrentándose en una fuerte discusión. La estilista ha confesado que la periodista la ha tratado muy mal, negándose incluso a ponerse uno de los collares que le trajo para su look. Ania asegura que ha sido muy difícil vestir a Lydia porque se negaba a ponerse algunas de las propuestas porque quería ocultar sus complejos y su talla 44, explotando Lydia en llanto al mencionar los complejos.

Pero a diferencia de otras veces, todos los compañeros del programa han salido en defensa de la compañera y cargado contra Ania, quien también ha terminado llorando tras su fuerte discusión con Lydia.

Kiko Hernández ha asegurado que las ambas están enfrentadas desde que coincidieron en A tú lado y que su guerra continúa vigente a día de hoy, por lo que seguramente Ania haya intentado echarle un pulso a Lydia a través de su look.