Nada menos que 4.000 citas y 61 tronistas. Son algunos de los datos que dejan las mil ediciones que cumple este miércoles 'Mujeres y Hombres y Viceversa', el dating show de Telecinco. Cuatro años han pasado ya desde el estreno de un programa que ha conquistado el ´prime time´ de las mediodías con historias que unen amor y celos con unas pizcas de humor y mucho atrevimiento.

'Mujeres y Hombres y Viceversa' alcanza una cifra mágica, nada frecuente en televisión. ¿Qué nos queda por ver en el programa?

-Todo. En este programa siempre pasa lo contrario de lo que se piensa. Cada pretendiente es una persona, un mundo. Este es un espacio que se mueve por la espontaneidad, por la naturalidad. Los participantes, cuando están varios días en plató, pueden pensar en una estrategia, pero lo cierto es que no controlan sus sentimientos. Y cuando eso pasa, surge la conquista, los celos y también el amor.

-¿Qué fue lo primero que pensaste cuando te propusieron el programa?

-Mira, cuando me lo propusieron, no entendía nada. Me hablaban de parejas, de tronos, de estar sentada en las escaleras... Pedí que no me explicaran más, que haríamos un programa piloto y ya veríamos. Y ahí descubres que el programa trata de personas que tratan de conquistarse. Yo tuve un flechazo con este programa. No me puse un límite, y te puedo asegurar que ha sido hace poco cuando nos dimos cuenta de que habíamos llegado a los 1.000 programas. Ha sido una sorpresa que recibimos con satisfacción y gratitud.

-¿Cuáles son las claves de éxito de ´Mujeres y Hombres y Viceversa´?

-Se puede controlar todo, menos lo que uno siente en ese momento. Siempre pongo el ejemplo de Mamen. Fue tronista, vivió intensamente, quiso controlar a sus pretendientes e indirectamente al programa. Pero lo que no controló es que estaba enganchada a uno de sus pretendientes, que la estaba viendo fuera aunque no lo quería decir. Lo que había de sincero entre ellos era que se querían y que querían estar juntos, y que se estaban haciendo mucho daño mutuamente. Así que la esencia del programa es que surge lo que ni los mismos participantes esperan.

-¿Qué momento ha sido el más especial?

-Me gusta mucho la relación que tiene Sonia, que fue muy buena tronista y muy buena pretendienta. Cuando fue tronista, creyó en su pareja y ahora siguen juntos. Es una relación que va bien, llevan casi siete meses. Me gustó muchísimo la final de Ferchu y Carol, que es otra pareja que continúa, aunque han tenido sus más y sus menos. Y la de Marina, que ha sido la más reciente. Su chico tenía pánico escénico. No podía controlar sus nervios porque no quería aparecer en televisión, pero hizo el esfuerzo y se la llevó.

-¿Y el más tenso?

-Quizá la final de Mamen y Abel, por citar alguno de los más recientes. Esa final, con padres y madres incluidos, cuando ella se enfada y dice que lo va a contar todo€ Se agreden verbalmente y sufren muchísimo. Ya habían sufrido muchísimo fuera de cámaras. A mí me a tocado abrazar en más de una ocasión a Abel, porque se sentía derrotado con lo que estaba pasando, y a Mamen también.

Te podría hablar también de Fer, pero ya lo tengo superado después de tanto tiempo. De hecho, creo que tengo una conversación pendiente con él. A ver si viene un día al programa y explica realmente como sucedió todo aquello, pero desde la serenidad de todos. Nos enfadamos mucho con él y no quisimos invitarle a hablar.

¿Cómo controláis que los tronistas y los pretendientes no se salten las normas?

No hay guión en el programa. Es imposible. Hay una escaleta con unos videos y unas citas, pero a veces tampoco se sigue porque un tronista habla con un pretendiente y hay que dar paso a ese video€ Yo observo y hago de directora de orquesta. En cuando a las normas, si ellos no las quieren seguir, es imposible continuar. Yo puedo entender ciertas situaciones. Por ejemplo, que te guste la tronista o un pretendiente, y que cuando están fuera del plató, en un ambiente festivo, por la noche, no puedan reprimir sus ganas de hablar o de besarse. Todo eso forma parte de la conquista del amor, pero lo que no puedo entender es que no nos lo cuenten.

¿Suelen durar las parejas que salen de MHyV?

Tenemos tres o cuatro parejas que continúan y otras que yo creo que se han precipitado. Una cosa es verse con un tiempo limitado, porque no tienen tiempo para verse después, y ahí se crea un factor sorpresa que ayuda a la seducción y el amor. Pero luego lo cogen con tantas ganas que se van a vivir juntos y no se separan. Y pasa que en el mismo viaje que les regalamos acaban saturados porque no se despegan el uno del otro. Lo cogen con tanta pasión, con tantas ganas, que se les acaba el amor de tanto usarlo, como decía Rocío Jurado.

¿Te atreverías a participar en el programa?

Yo ya estoy conquistada, así que ni me lo planteo€ Pero siempre digo que ser tronista es un chollo; vienes, te pagan por ello, te salen bolos, te hacen famosa, te vienen un montón de chicos€ El problema es que tienes que darte cuenta de quien viene a conquistarte y quien viene simplemente a la tele, y entonces se crea la desconfianza, porque no sabes si existe una atracción de verdad o es que te está bailando el agua€

¿Tienes algún proyecto paralelo a MHyV?

No he pensado en nada nuevo, porque cuando hay algo la cadena me lo propone. Lo que sabe la cadena es que yo siempre estoy dispuesta a trabajar. Afortunadamente puedo trabajar en lo que es mi pasión. Siempre que se pueda compaginar, yo estaría encantada de estar en otro proyecto, pero si no fuera así no creas que me divorciaría de este programa.

¿Qué tipo de programas ves?

Me veo todos los ´Callejeros viajeros´. Como no tenemos mucho tiempo para viajar, todo lo que sean programas de este tipo, me encantan. Y luego me veo todos los programas de niños. Estoy en esa etapa por mi hija.

Hemos visto a Pilar Rubio protagoniza una serie y a Christian Gálvez en una película. ¿Darías el salto a la interpretación?

-En principio, no me llama la atención. Sería complicadísimo para mí. En un momento, me propusieron hacer algo con José Coronado, patrocinado por Telecinco, y yo dije que sí. Y cuando ya estaba motivada, no se hizo, se quedó en un proyecto. Pero yo soy periodista, y lo mío es intentar presentar lo mejor posible.