Lo que se acuerde en el Consejo Interterritorial de Salud será de obligado cumplimiento para todos. La vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo apunta "no debería haber ni debate. "No hay ni Semana Santa, ni nada".

El plan propone cierres perimetrales entre el 26 de marzo y el 9 de abril, toque de queda de 10 de la noche a seis de la mañana y evitar viajes innecesarios.

Suspender los eventos multitudinarios y que las reuniones públicas o privadas sean de un máximo de cuatro personas. Se pide que se eviten los reencuentros familiares. Inicialmente se propuso que los estudiantes no regresaran a casa estas vacaciones, pero finalmente se ha eliminado la mención expresa.

Canarias no parece dispuesta al cierre perimetral, pero sí a restricciones adicionales. Madrid también pone la nota discordante. La presidenta Díaz Ayuso a golpe de tuit compara la Semana Santa con las elecciones catalanas.

Castilla-La Mancha, ejerce de buen vecino "los que crean en España,en el país, den ejemplo sometiéndose al consenso", dice su presidente.

Y desde Valencia contestan a Díaz Ayso "nosotros los queremos y quermos verlos este verano", asegura Ximo Puig.

Para entonces cabe esperar que el porcentaje de vacunación sea suficiente para minimizar los riesgos.