Cientos de personas hicieron cola en las plazas de Ourense y A Ferrería para el reparto de pollos de Unións Agrarias, que distribuyó 2.000 kilos en carne gratuitamente como protesta, porque “no estamos ni cubriendo costes”, tras los incrementos de precios de la luz y los piensos, aseguran. Producir un kilo de pollo en una granja media de Galicia cuesta en estos momentos 0,23 céntimos, y los avicultores reciben sólo 0,18 céntimos de las cadenas distribuidoras y supermercados lo que les supone perder 0,5 céntimos en cada venta, más de 1.500 euros al mes.