Enésima rotura en el abastecimiento: tercera en dos semanas

Había sido reparada nuevamente anteayer

El de esta mañana parece un problema aún más importante

No se puede intervenir hasta que baje la marea

Cacabelos da un "golpe en la mesa" y dice "basta"

La zona intermareal en la que rompe continuamente la tubería de abastecimiento.

La zona intermareal en la que rompe continuamente la tubería de abastecimiento. / Iñaki Abella

Manuel Méndez

Manuel Méndez

Ha vuelto a suceder, para indignación, estupor y enfado del alcalde, vecinos y empresarios. La red general de abastecimiento de agua de la que se sirve O Grove está rota de nuevo.

Es la tercera rotura en apenas dos semanas, y se produce solo 48 horas después de la última reparación, la cual a su vez, se realizó después de tres días perdiendo agua potable sin parar.

Meaño y Sanxenxo

Se trata de la tubería que, procedente de Meaño avanza a través de A Revolta (Sanxenxo) entrar a O Grove por el istmo de A Lanzada.

Es en esa zona donde hay un tramo sumergido bajo el mar que es el que causa problemas de forma intermitente desde hace más de una década, siendo incalculable el número real de roturas que ha padecido.

Quiere esto decir que de nuevo habrá que esperar a que baje la marea para determinar el alcance real de este enésimo tropezón, aunque parece que se trata de un “episodio grave”, según denuncia el alcalde de O Grove.

Puede tardar días

Y habrá que aguardar también a la bajamar para afrontar la reparación, que si se complica puede dejar a O Grove sin agua durante días.

Es por todo ello que el alcalde, José Cacabelos Rico, abunda en lo que ya denunció el domingo pasado en relación con esta tubería, a través de FARO DE VIGO, y, visiblemente molesto, da “un golpe en la mesa”.

La reparación realizada el miércoles.

La reparación realizada el miércoles. / Iñaki Abella

Lo hace para llamar la atención de la Xunta y exigir que, “de una vez por todas”, tome este problema en serio y establezca “una cuantía económica suficiente para encontrar una solución definitiva”.

En relación con esto, hay que insistir en que existe un proyecto redactado por la propia Xunta para cambiar la tubería y sacarla de esa zona del Complejo Intermareal Umia-O Grove en la que pasa bajo el mar. Lo que no hay es dinero para hacerle frente.

"Basta de disculpas"

Pero Cacabelos entiende que “se trata de un asunto de interés general”, por eso considera que “la Xunta tiene que dejarse ya de disculpas” y coger este toro por los cuernos.

Lo plantea desde el convencimiento de que este tipo de roturas “van a ir a más en los próximos y días y meses”, dado que la tubería parece estar podrida.

Desde 2007

“Ya advertimos desde 2007, cuando entré en la Alcaldía, de que su vida útil había sido superada y de que ya no ofrece garantías; y a pesar de esas advertencias no se ha hecho nada”, lamenta el primer edil.

Su intención ahora es, a través de la Mancomunidade do Salnés, que gestiona la tubería, solicitar una reunión con el presidente Alfonso Rueda o cualquier otro alto cargo de la Xunta “para pedirles que, con la máxima urgencia posible, establezcan una partida económica para cambiar esta red de abastecimiento supramunicipal”.

"Situación insostenible"

Lo plantea con rotundidad porque “la situación es insostenible” y porque “no se puede tolerar que la Xunta siga maltratando a O Grove y los grovenses”.

Dicho lo cual insiste en una vieja advertencia: “Si esto sigue así vamos a quedarnos muchos días sin agua en verano, pues esta vez coincide que los consumos son bajos y que tenemos los depósitos llenos, garantizando el suministro al menos durante uno o dos días, pero si esto pasa en julio o agosto no tendremos agua ni para dos horas”.

José Cacabelos concluye: “Uno ya no sabe qué decir ni qué pensar, puesto que resulta incomprensible que la Xunta no actúe de forma urgente para acabar con esto de una vez por todas y garantizar un servicio vital, como es el de abastecimiento de agua”.

Lo cierto es que el alcalde socialista de O Grove no solo pidió ayuda, en multitud de ocasiones anteriores, tanto a la Xunta como a la Mancomunidade do Salnés, de la que depende la tubería de abastecimiento.

Frente común

También reclamó apoyo a los grupos políticos de la oposición municipal y a los empresarios locales, pues tanto los bares, restaurantes y hoteles como el comercio, las depuradoras, conserveras y demás negocios salen perjudicados, en mayor o menor medida, cuando el suministro falla.

Y ahora, ante el enésimo destrozo en la misma zona intermareal, a escasos metros del lugar reparado el miércoles, el máximo mandatario vuelve a pedir ese apoyo, invitando a la asociación Empresarios Grovenses de Bens e Servicios (Emgrobes) a arrimar el hombro.

Trata de conseguir un frente común mediante el que “podamos convencer a la Xunta de que no se puede tolerar esta situación por más tiempo”, explica.

Están en juego tanto el bienestar y la calidad de vida de los ciudadanos mecos, como el de sus visitantes. Al igual que se juega con la imagen de un destino turístico tan importante como el meco.

“Lograr la nueva tubería es una reivindicación de todos y para todos que se sustenta en hechos reales, probados y tan graves como estas roturas constantes que no solo generan desabastecimiento y afectan a la imagen y la economía de O Grove y la comarca, sino que provocan un gasto extraordinario y desperdician un bien tan preciado como el agua”, sentencia el regidor.

Una sucesión de parches que parece empeorar las cosas

Las reparaciones que la empresa adjudicataria se ve obligada a realizar en la tubería submarina de la mancomunidad no son más que una sucesión de parches que solo sirven para empeorar las cosas.

Cada vez que se abre y cierra el suministro a causa de una avería, o ante la necesidad de repararla, se producen alteraciones de presión que, a la postre, contribuyen a que la canalización vuelva romper al poco tiempo

Así lo entiende también el alcalde, José Cacabelos, que desde hace mucho tiempo advierte de que “los arreglos puntuales no resuelven un problema estructural tan grave”.

Su propuesta es la de cambiar este tramo de abastecimiento de las marismas y trasladarlo a la carretera de Noalla, donde es más fácil actuar y solucionar los posibles imprevistos que surjan. Y en ello insiste ante Augas de Galicia desde hace más de una década.

Una petición a la que se suma la reclamación de ampliación de la estación potabilizadora de agua de la propia mancomunidad, ya que se queda pequeña para dar respuesta a las demandas de la población.

Sobre todo en temporada estival cuando se multiplican las cifras de usuarios en todos los municipios, y muy especialmente en el grovense.